La República de Moldavia, también conocida como Moldavia, es un país intercultural. La antigua República Soviética no es miembro de la Unión Europea, pero está estrechamente vinculada a ella económicamente a través de diversos acuerdos. No obstante, Moldavia es uno de los países más pobres de Europa. Sobre todo, la población rural, las mujeres, los jóvenes y las minorías étnicas sufren la pobreza y la falta de perspectivas. Casi un millón de personas han abandonado ya el pequeño país en busca de mejores condiciones de vida. Además de la emigración, el déficit de Estado de Derecho y la corrupción son algunos de los principales desafíos.
Kolping in situ
Poco después de la independencia, se fundó en 1992 una Asociación Kolping en la República de Moldavia, que hoy consta de una sola Familia Kolping con unos 50 miembros, de los cuales unos 30 son niños. La Familia Kolping Chișinău se dedica principalmente a proyectos sociales, como por ejemplo el apoyo a familias pobres de las zonas rurales, a un orfanato y la gestión de un comedor para ancianos sin recursos.
