Desarrollar una sociedad civil fuerte para que la justicia crezca: Esto es el objetivo central de KOLPING INTERNATIONAL. No logramos una prosperidad duradera para todos si sólo mejoramos las condiciones de vida de personas individuales. Para un desarrollo sostenible, las estructuras de la pobreza deben ser eliminadas. Los miembros de nuestra asociación trabajan en todo el mundo para alcanzar este objetivo.
CONFORMAR LA IGLESIA Y LA SOCIEDAD
El objetivo de Adolfo Kolping era fortalecer la sociedad en su conjunto a través de la solidaridad y la participación ciudadana. Para KOLPING INTERNATIONAL, los proyectos de reducción de la pobreza son, por lo tanto, sólo un primer paso para ayudar a las personas desfavorecidas. Como una comunidad fuerte, queremos conformar la iglesia y a la sociedad para que el mundo sea más justo para todos. Juntos queremos iniciar cambios sostenibles y promover la democracia.
JUNTOS PODEMOS SER MÁS OIDOS
En este sentido, KOLPING INTERNATIONAL anima a sus miembros a comprometerse con el bien común como una sociedad civil viva. Nuestras Familias Kolping ofrecen oportunidades ideales para ello. Es allí donde los socios experimentan: ¡Juntos podemos alcanzar mucho! Si hay Familias Kolping fuertes, el Estado y sus administraciones afiliadas deben enfrentarse con sus demandas. Además, nuestras Familias Kolping son lugares donde se vive y practica la democracia a pequeña escala.
TRABAJO DE EDUCACIÓN Y CONCIENCIACIÓN
Para iniciar cambios en las sociedades a través de la participación ciudadana es importante llevar a cabo el trabajo educativo y de concienciación. Lo mismo se aplica a la formación de líderes. Por lo tanto, KOLPING proporciona información sobre los derechos y obligaciones civiles, discute temas sociopolíticos y organiza acciones conjuntas. Son sobre todo los valores cristianos los que sirven a los miembros de nuestra asociación como motor de su compromiso.
LAS MUJERES COMO FUERZA MOTRIZ
En muchas Familias Kolping son sobre todo las mujeres que participan activamente por el bien de sus familias, pero también en actividades sociales. Frecuentemente las mujeres son la fuerza motriz cuando se trata de organizar visitas a los enfermos, iniciar programas de apoyo a los niños o de organizar manifestaciones en la calle contra la injusticia. Están orgullosas de su compromiso que aumenta su autoestima y mejora su posición en la sociedad. Es mucho más fácil para mujeres fortalecidas luchar por el cambio para sí mismas y para los demás.