Salud en lugar de lucro
El ferviente compromiso de los miembros Kolping de Bolivia y fuertes lazos de cooperación amistosa con Kolping Suiza y KOLPING INTERNATIONAL lo hicieron posible: En la actualidad, Kolping Bolivia es una asociación católica reconocida en el país y altamente valorada por sus servicios de salud. Durante su visita, el Secretario General de KOLPING INTERNATIONAL pudo convencerse del compromiso con que ponen manos a la obra los responsables locales.
“Esto va mucho más allá del trabajo sustentable de proyecto”, dice Demele. “Acá, todos dan todo lo mejor de sí para ayudarles a los pobres y realizar un trabajo profesional, tanto los empleados como los voluntarios”. Especialmente los centros de salud lo impresionaron. “Las personas que concurren a nuestro centro no tienen un trabajo estable sino que son jornaleros y ganan cada día lo necesario para su supervivencia. Habitualmente, tienen varios hijos. Son personas que son verdaderamente pobres. Hemos organizado nuestros aranceles de modo que les sean accesibles”, explica Elizabeth Reyes, directora del centro de salud gestionado por Kolping Bolivia.
El centro está ubicado en El Alto, en la periferia de la metrópoli de La Paz. En esta zona, la gente es pobre y el Estado, débil. Aunque existe un sistema de salud estatal, el sistema está saturado. “En un centro estatal hay que anunciarse a las tres, cuatro de la mañana para ser atendido a lo largo del día. Las personas de esta zona no están en condiciones de concurrir a una clínica privada, donde la consulta les costaría entre 15 y 20 euros. En Kolping la consulta les cuesta dos euros. Eso es lo mínimo que tenemos que cobrar”, explica Reyes.
Kolping en Bolivia quiere decir: Familias Kolping comprometidas e instituciones que les ayudan activamente a las personas.