Ruanda: Ayuda de emergencia y sustentabilidad mediante cabras y energía solar
Con donaciones provenientes del fondo para el coronavirus, muchas Familias Kolping de Ruanda recibieron ganado pequeño. Con el estiércol de los animales, los campesinos logran mejores cosechas y además pueden vender los animales obteniendo una ganancia. Hace muchos años que el exdocente Prosper Baziruwiha de Kamembe cría lechones y puede vivir muy bien de la venta de los cerdos – mejor que de su sueldo docente. El dinero le alcanza para pagar la escolaridad de sus hijos. Prosper incluso gana tanto que ya pudo donar 13 lechones a familias pobres de su vecindario.
A fines de diciembre de 2020, Pélagie Mukashema recibió un panel solar para su casa. De este modo, ahora cuenta con suficiente electricidad, lo que beneficia a todo su entorno: sus cuatro hijos, que concurren al colegio secundario y a la universidad, ahora también pueden estudiar sin inconvenientes de noche con luz eléctrica. Y sus vecinos pueden usar la fuente eléctrica para recargar sus teléfonos celulares.
Gracias a una donación importante de un hermano Kolping, ahora también el centro de formación profesional KOLPING de Muramba cuenta con electricidad durante las veinticuatro horas: 24 grandes paneles solares garantizan el abastecimiento de energía eléctrica. Los estudiantes se alegran porque ahora puede utilizar las máquinas y herramientas sin cortes de luz.
